¿Como están?, esta vez les vengo a contar la segunda vez que estuve con Sebas, el chico gay qué vive cerca de mi, si no han leído la primera historia, deberían, así no van a perderse en algunos detalles.
Fue un tiempo después de la primera vez, no recuerdo cuanto tiempo pasó, tal vez unos dos meses, luego de esa mañana tan apasionante qué tuvimos ese día ebrios, nada cambió entre nosotros, excepto que el me enviaba nudes a los que yo no respondía, era demasiado tímido y aun no asimilaba del todo mi orientación sexual, era una gran decisión a tomar y, aunque no le respondía con desnudos, si hablábamos frecuentemente, uno de esos días, por la mañana me escribe diciendo que en la tarde quedaba sola su casa y adjunto una foto de sus nalgas bien abiertas, mostrándome ese ano tan delicioso y rosita.
"No lo se, me da pena" - le escribo literalmente sonrojado detrás de la pantalla, aunque ya tenía un bulto flacido en mis pantalones.
"¿Me estas hablando en serio?, nos tragamos el semen del otro y estuviste bañado de mi saliva, a estas alturas ya has visto cada parte de mi" - Me responde claramente molesto.
"¿Y si nos descubren?" - Le digo muy nervioso.
"¿Qué carajos importa?, dejame tragarme ese enorme trozo, por favor" - Me respondió y, en realidad no me asustaba lo que pensaban los demás en general, sino nuestros amigos, cabe recordar que el fue novio de otro amigo del grupo y por eso sentía que lo que estaba haciendo estaba muy mal.
"Sebastián, eres el ex de uno de mis buenos amigos, ¿Sabes que existe un código, verdad?" - Le digo molesto.
"No, lo que pasa es que te asusta por lo bien que lo hicimos, casi te dejo sin alma cuando te la chupe" - Responde descaradamente y mi pito me traicionó, ya que se estaba lavantando.
"¿Pero que carajos dices?, ni que me fuera a enamorar solo porque me hagas un oral, ya que te recuerdo que quien se echo para atrás fuiste tu" - Respondo sonriente.
"Si, claro, sabes que este culito te prende muchísimo, ponte los pantalones y y te los quitas aquí en mi cuarto de nuevo, cobarde" - Me dice y estalle en ira, a los segundos me envía otra foto en cuatro patas pero esta vez con unos boxers negros puestos, los cuales no eran capaces de contener semejante trasero.
"Eso no serias capaz de decírmelo en mi cara" - Respondo totalmente erecto, traicionado por mi propio pene.
"Ven y te lo digo, pero te advierto que no vas a pronunciar palabra porque vas a estar ocupado gimiendo" - No podía creer este chico lo desvergonzado que es, pero no podía negar tampoco que eso me excitaba demasiado.
"Mejor callate, no voy a seguirte el juego" - Le escribo a los minutos y desactivo los datos del celular y el WiFi, no pensaba darle el gusto.
"Y tu, hijo de perra, somos un equipo, ¿Recuerdas? - digo en voz baja, viendo furioso el bulto que se había formado en mis pantalones, lo acomodo para que no se note y me acuesto boca arriba viendo el techo, esperando a que bajara la ereccion.
Comienza a sonar el celular, no hacía falta ver quien era, ya lo sabía, "Malcriado de mierda" - pensé, sabía que era Sebas con ánimos de discutir, algo que le encantaba hacer con todo el mundo, lo ignoro, al rato comienza a sonar de nuevo, veo la pantalla y si, era Sebas, colgué la llamada y puse el celular boca abajo en la cama.
El celular suena de nuevo y esta vez era un número local desconocido.
"¿Es en serio?, que molesto este chico" - Digo y contesto, obviamente era el.
"Ven y callame, y así te digo todo lo que te escribí de boca a boca, pero a cambio tu me vas a ahogar con esa tremenda salchicha" - Antes de poder contestar me cuelga, nada nuevo de el, mire hacia abajo y allí estaba de nuevo la ereccion.
"Mierda, voy a entrar a un convento y te vas a pudrir por imbecil" - Digo hablando con mi pene, totalmente normal jaja jaja, en fin, ya era pasado el mediodía y no sabía que hacer, la verdad si tenía muchas ganas pero sabía que estaba fallando como amigo al siquiera responder a las provocaciones de Sebas. Honestamente, entre los flashbacks de la primera vez y lo que me había dicho me habían calentado mucho, sentía la cara ardiendo y ni hablar del bulto entre mis piernas, opte por la mejor opción disponible; Una buena ducha fría para bajar toda la calentura, la cual funcionó.
Enciendo el WiFi y allí estaba entre las notificaciones un mensaje de Sebas, lo ignore por unas horas, pero al final lo termine abriendo.
"Mi casa estará sola a partir de las 4, ya me hice el lavado" - Decia el mensaje, revise la hora y ya eran pasadas las 4, no lo pensé dos veces, me bañe de nuevo, me cambie la ropa de casa y me puse unos shorts y una camisa deportiva rápidamente, un poco de perfume y a fui a su departamento, en el camino note que el estaba por la calle, hice como si no lo hubiese visto y cautelosamente entré a su edificio y subí al piso donde vive.
"Hora de comer, perra" - Le escribo, obviamente estaba molesto aún por lo que me había escrito, pasaron los minutos y no respondía, me puse a leer un libro en el teléfono y espere a que llegara, sin darme cuenta eran las 5 y 20. "¿Donde carajos estas? - Le vuelvo a escribir, impaciente y a punto de irme.
"Buscando quien me de pene, ya que alguien se acobardo" - Me escribe y en seguida le marco al celular, nada, no respondía, lo vuelvo a llamar, nada aun, lo llamo una tercera vez y me contesta por fin.
"¿Si?, Ah, si, el Pendrive al que le íbamos a pasar música" - Me dice y con eso entendí que habían conocidos con el y que podíamos levantar sospechas.
"Eemm, si, te sugiero que te apures, o te aseguro que el Pendrive no va a entrar en tu computadora nunca" - Un comentario muy de doble intención, pero no me importaba, ¿Como se atrevía a tratarme así?.
"Uuh, que rudo" - Responde en tono de burla y cuelga antes de que me de chance de contestarle.
Al cabo de unos minutos se abre la puerta del ascensor y allí estaba, yo lo es paraba en el umbral de la escalera, deje que pasara de largo, abriera la puerta y reja, y luego entre a su casa, cerrando reja y puerta detrás, allí estaba el, poniendo música alta de nuevo y yo pase de largo y lo espere junto a la puerta de su cuarto con los brazos cruzados.
"Pero que obediente.." - Comienza a decir por sobre la música y yo lo hago callar poniendo una mano en su cuello y con la otra poniéndolo contra la pared.
"Cierra la maldita boca, puta" - Le digo, y ni yo me reconocí en ese momento, supongo que era una mezcla de excitacion y furia, el por un momento pareció confundido pero puso una mano sobre mi entrepierna y con otras apretó mis mejillas, a lo que respondí besándolo hambriento sin quitar las manos de su cuello, alejaba por momentos mi cara de la suya y el buscaba acercarse para besarme, pero deje de hacerlo y acercó sus labios mojados a mi oído.
"Eres un miedoso de mierda" - me dice y me lame la oreja " Y te prefiero sudado la verdad, ¿Te bañaste y te perfumaste solo para venir a verme? - Muerde mi lóbulo y yo quedo atonito, la verdad si daba el mensaje opuesto al desinterés con mis acciones, mi entrepierna ardía por la manera en la que Sebas la masajeaba y la cosas que me hacía.
Lo aparto de mi oreja y nos miramos fijamente, intenta besarme pero lo alejo, comienzo a quitarme los zapatos sin quitar ambas manos de su cuello y el sonreía, metiendo una mano por debajo de la camisa y la otra por dentro de mis shorts, frotando su mano en mi ereccion y la otra pellizcando mi pezon, me acerco lentamente como si lo fuera a besar y al último segundo me echo atrás, viendo su descontento ya que el incluso había cerrado los ojos esperando que lo besara, me acerco y lo beso mordiendo su labio inferior y se le escapa otro gemido qué se mezcla con la música de la sala.
De un momento a otro, sin darme cuenta estábamos dentro de su cuarto, el me empujó hacia atrás y caí soltando su cuello, el entró y cerró la ventana y cortina de su cuarto rápidamente, yo quedo sentado en el piso y el se acerca, sentándose sobre mis muslos,
Bailandome lento al ritmo de la música de la sala, yo ya estaba fuera de mi, ya estaba sudando, comencé a lamer sus labios y comence a meter y sacar mi lengua de su boca, el sabía a piña y yo a dentrifico, se lanza sobre mi y me acorrala contra el piso, soltando una gota de saliva que cae lentamente desde su boca aterrizando en la mía, ambas manos estaban en mi pecho y mis manos se posaron en sus nalgas colosales, masajeandolas y dándole nalgadas, el comenzó a frotar mis pezones sobre la camisa y con mis manos lo posicione para que frotara sus nalgas en mi notable ereccion.
Acerca de nuevo su cara a mi, y por primera vez nos besamos de manera suave y dulce rompiendo un poco el ritmo.
"Te tengo un regalo" - Me dice al oído con su aliento caliente y se baja de mi, quitándose los zapatos y los pantalones, revelando una ropa interior qué nunca había visto antes, luego investigue y me entere de que se llaman Jockstraps, me levante sobre mis codos y aprecie esa ropa interior tan sensual, sin pensarlo me subí a su cama y me quite la camisa.
"¿A cuantos no le habrás dicho eso?" - Le digo poniendo las manos detrás de la cabeza.
"Idiota" - Me responde acostándose sobre mi, boca abajo, subiendo lentamente ese par de jugosas nalgas y ese ano rojizo que me causaba tanta hambre, no pensé dos veces y me incline hacia adelante, acercandome a su ano, oliendolo lentamente, el me quito las medias y comenzó a lamer mis pies, a lo que respondí comenzando a mordisquear su enorme jamón, el besaba y lamia mis pies con hambre también, supongo que realmente nos deseabamos en ese tiempo.
Sin más preámbulos, comencé a lamer sus nalgas y pasar la lengua por su ano, el cual abría y cerraba constantemente, lo cual provocó que me perdiera entre sus nalgas comiendo ese ano que tanto deseaba y metiendo mi lengua dentro como tanto le gustaba, el dejaba de mover sus nalgas de adelante a atrás, como señalandome qué no parara. Que bien le quedaban esos jockstraps, puse un mano en una nalga y la otra en su bulto bien duro y el paro de lamer mis pies, supongo que gemia pero esta vez sentí que la música estaba más alta y no podía escuchar sus gemidos, metí dos dedos en mi boca y de allí los lleve a su ano, metiéndolos lentamente, dilantandolo, el respondió poniéndose en cuatro y arqueando bastante la espalda mientras se aferraba fuertemente a mis piernas y lamiendo mis pies de nuevo.
Comencé a meter y sacar profundamente mis dedos y ahora si lo escuchaba gimiendo, con la otra mano me masajeaba el pene sobre mis shorts, hasta que pare, tome los jockstraps por los bordes y se los quite, deslizando los por sus piernas y tirandolos lejos, pude apreciar su ereccion, la verdad es que traía un buen paquete, unos 15 cm aproximadamente, muy venoso, no era tan gruesa como la mía pero estaba realmente muy dura, el se sienta de repente en la cama.
Me señala los shorts y me ayuda a quitármelos junto con mis boxers, después se quita la camisa y sin más preámbulos se arroja rápido sobre mi verga y comienza jugar con ella, frotando hacia abajo mi glande, tomando el líquido preseminal y jugando con el entre sus dedos para meterlo en su boca, yo lo observaba atentamente, me di cuenta que como aquella vez, no estaba controlando bien mi respiración, así que me puse en ello.
Comenzó a pasar su lengua sobre mi glande en círculos y sonreía al ver como me retorcía y gemia por la sensación de su lengua, al darse cuenta que se había tragando toda mi precum, se paró y buscó en su gaveta un Condon, lo abrió, y sin dilaciones me lo puso lentamente, yo sentía que iba a acabar pronto, el jugo un rato con mi verga, ajusto bien el Condon y comenzó a darme un oral, el Condon era de sabores, era amarillo así que supongo que era de banana, lo tome del cabello y empecé a guiar el ritmo del oral, el ya casi la metía toda así que sin titubear lo halaba del cabello para que la sacara toda y s ela volviera a meter a fondo, ese sonido que hacia al ahogarse era el cielo, aun lo recuerdo y me excita muchísimo.
Paramos y se sienta en la cama como esperando la orden, le hago una seña para que acerque su oído.
"Te vas a sentar en ella y la vas a meter toda" - El me miró sorprendido y parece que le encantó, me beso y un sabor como a chicle de banana me inundó la boca, supongo que el Condon si era de ese sabor después de todo. Le hago la señal para que acerque sus nalgas, lamo su ano de nuevo e introduzco el pulgar para dilatarlo bien, el de pronto acabo, disparando su semen sobre la cama y mis pies, yo saco mi pulgar y el lame su semen de mis pies y lo traga.
Me acuesto más atrás y pongo la espalda en el copete de la cama, abriendo las piernas para hacerle un espacio al culto de Sebas, el se acerca y los ayudo a meter mi verga en su ano, primero mete el glande y lo saca rápidamente, lo que me hace entender que lo lo disfrutaba, se veía muy tenso, la volvió a meter pero solo hasta la cabeza y la volvió a sacar, yo lo tome del hombro e hice que se volteara, lo atraje para besarlo y me dejo, lo bese y lo acaricie por todos lados, sintiendo como dejaba la tensión atrás, meti mi índice y mi dedo medio en su boca, pongo una mano en su nuca para que no dejara de besarme y meto los dedos dedos húmedos en su ano, el gemia en mis labios y yo le comencé a acariciar el cabello mientras metía y sacaba mis dedos mientras con una de sus manos me masturbaba.
Solté su cabello y comenzó a besarme desde mi cuello, trazando camino hasta mi pene, el cual se metió todo de golpe y yo no pude evitar retorcerme de placer mientras el metía y sacaba todo mi miembro de su boca mientras me veia, le puse una mano en la barbilla para que alzar a la cara, lo hizo sacando mi miembro de su boca.
"¿Listo?" - Asintió y se posiciono de nuevo para meter mi verga en su delicioso culo, metió la cabeza y un poco más, pero estaba apretando mucho, así mismo me incline hacia su oído "Estas demasiado tenso, así no va a entrar".
Asintió y la saco, posicionando se bien y metiendo de nuevo la cabeza y un poco más, pero aunque estaba más relajado, se veía que no lo disfrutaba, se me vino a la mente que tal vez era la posición, así que la saque y me baje de la cama, posicionandolo en cuatro patas y besándolo desde los pies hasta su cuello lentamente, arqueo bien su espalda y comencé a lamerle el ano y mordisquear sus nalgas, allí estaban sus gemidos de nuevo, metí mi pulgar en su boca, luego en la mía, escupí su ano y procedí a meter allí mi pulgar sintiendo las ricas paredes de su orificio.
"Mejor?" - Pregunte acercandome a su oído y dándole besitos en el cuello, el solo asintió y puso ambas manos sobre sus nalgas para abrirlas bien, yo comencé a meter mi miembro, solo llevaba la cabeza y ya estaba tenso y apretaba mucho, por lo que pare y comienzo a acariciar sus nalgas pero el seguía tenso, saco mi pene e intento volver a meterlo pero seguía siendo la misma historia, por lo que decidí dejar de intentar penetrarlo, me quite el Condon, lo tire a un lado y comencé a frotar mi pene entre sus nalgas, lo que si parecía gustarle, al cabo d eun rato acabe sobre sus nalgas y espalda, recogí mi semen y lo compartí boca a boca hasta que no quedó más y me acosté boca arriba en su cama.
"Estuvo genial, gracias por todo" - Me dice y por primera vez lo veo sonrojado.
"Si, esa ropa interior estaba muy sexi" - Le dije sonriendo.
"Deberíamos bañarnos, estamos hechos un desastre" - Asiento.
"Dame un momento, por favor" - El se dirige al baño y yo me quedo unos minutos acostado, me paro me dirijo al baño y terminamos tocandonos lo que nos llevo a seguir con la acción, acabe de nuevo en su cara y el no paraba de besar mi verga, se trago cada gota de semen que bote, nos bañamos, nos vestimos y cuando iba a salir de su casa me llama.
"El Pendrive, recuerda que venias porque te iba a pasar música" - Dice haciendo comillas con sus dedos.
Fue un tiempo después de la primera vez, no recuerdo cuanto tiempo pasó, tal vez unos dos meses, luego de esa mañana tan apasionante qué tuvimos ese día ebrios, nada cambió entre nosotros, excepto que el me enviaba nudes a los que yo no respondía, era demasiado tímido y aun no asimilaba del todo mi orientación sexual, era una gran decisión a tomar y, aunque no le respondía con desnudos, si hablábamos frecuentemente, uno de esos días, por la mañana me escribe diciendo que en la tarde quedaba sola su casa y adjunto una foto de sus nalgas bien abiertas, mostrándome ese ano tan delicioso y rosita.
"No lo se, me da pena" - le escribo literalmente sonrojado detrás de la pantalla, aunque ya tenía un bulto flacido en mis pantalones.
"¿Me estas hablando en serio?, nos tragamos el semen del otro y estuviste bañado de mi saliva, a estas alturas ya has visto cada parte de mi" - Me responde claramente molesto.
"¿Y si nos descubren?" - Le digo muy nervioso.
"¿Qué carajos importa?, dejame tragarme ese enorme trozo, por favor" - Me respondió y, en realidad no me asustaba lo que pensaban los demás en general, sino nuestros amigos, cabe recordar que el fue novio de otro amigo del grupo y por eso sentía que lo que estaba haciendo estaba muy mal.
"Sebastián, eres el ex de uno de mis buenos amigos, ¿Sabes que existe un código, verdad?" - Le digo molesto.
"No, lo que pasa es que te asusta por lo bien que lo hicimos, casi te dejo sin alma cuando te la chupe" - Responde descaradamente y mi pito me traicionó, ya que se estaba lavantando.
"¿Pero que carajos dices?, ni que me fuera a enamorar solo porque me hagas un oral, ya que te recuerdo que quien se echo para atrás fuiste tu" - Respondo sonriente.
"Si, claro, sabes que este culito te prende muchísimo, ponte los pantalones y y te los quitas aquí en mi cuarto de nuevo, cobarde" - Me dice y estalle en ira, a los segundos me envía otra foto en cuatro patas pero esta vez con unos boxers negros puestos, los cuales no eran capaces de contener semejante trasero.
"Eso no serias capaz de decírmelo en mi cara" - Respondo totalmente erecto, traicionado por mi propio pene.
"Ven y te lo digo, pero te advierto que no vas a pronunciar palabra porque vas a estar ocupado gimiendo" - No podía creer este chico lo desvergonzado que es, pero no podía negar tampoco que eso me excitaba demasiado.
"Mejor callate, no voy a seguirte el juego" - Le escribo a los minutos y desactivo los datos del celular y el WiFi, no pensaba darle el gusto.
"Y tu, hijo de perra, somos un equipo, ¿Recuerdas? - digo en voz baja, viendo furioso el bulto que se había formado en mis pantalones, lo acomodo para que no se note y me acuesto boca arriba viendo el techo, esperando a que bajara la ereccion.
Comienza a sonar el celular, no hacía falta ver quien era, ya lo sabía, "Malcriado de mierda" - pensé, sabía que era Sebas con ánimos de discutir, algo que le encantaba hacer con todo el mundo, lo ignoro, al rato comienza a sonar de nuevo, veo la pantalla y si, era Sebas, colgué la llamada y puse el celular boca abajo en la cama.
El celular suena de nuevo y esta vez era un número local desconocido.
"¿Es en serio?, que molesto este chico" - Digo y contesto, obviamente era el.
"Ven y callame, y así te digo todo lo que te escribí de boca a boca, pero a cambio tu me vas a ahogar con esa tremenda salchicha" - Antes de poder contestar me cuelga, nada nuevo de el, mire hacia abajo y allí estaba de nuevo la ereccion.
"Mierda, voy a entrar a un convento y te vas a pudrir por imbecil" - Digo hablando con mi pene, totalmente normal jaja jaja, en fin, ya era pasado el mediodía y no sabía que hacer, la verdad si tenía muchas ganas pero sabía que estaba fallando como amigo al siquiera responder a las provocaciones de Sebas. Honestamente, entre los flashbacks de la primera vez y lo que me había dicho me habían calentado mucho, sentía la cara ardiendo y ni hablar del bulto entre mis piernas, opte por la mejor opción disponible; Una buena ducha fría para bajar toda la calentura, la cual funcionó.
Enciendo el WiFi y allí estaba entre las notificaciones un mensaje de Sebas, lo ignore por unas horas, pero al final lo termine abriendo.
"Mi casa estará sola a partir de las 4, ya me hice el lavado" - Decia el mensaje, revise la hora y ya eran pasadas las 4, no lo pensé dos veces, me bañe de nuevo, me cambie la ropa de casa y me puse unos shorts y una camisa deportiva rápidamente, un poco de perfume y a fui a su departamento, en el camino note que el estaba por la calle, hice como si no lo hubiese visto y cautelosamente entré a su edificio y subí al piso donde vive.
"Hora de comer, perra" - Le escribo, obviamente estaba molesto aún por lo que me había escrito, pasaron los minutos y no respondía, me puse a leer un libro en el teléfono y espere a que llegara, sin darme cuenta eran las 5 y 20. "¿Donde carajos estas? - Le vuelvo a escribir, impaciente y a punto de irme.
"Buscando quien me de pene, ya que alguien se acobardo" - Me escribe y en seguida le marco al celular, nada, no respondía, lo vuelvo a llamar, nada aun, lo llamo una tercera vez y me contesta por fin.
"¿Si?, Ah, si, el Pendrive al que le íbamos a pasar música" - Me dice y con eso entendí que habían conocidos con el y que podíamos levantar sospechas.
"Eemm, si, te sugiero que te apures, o te aseguro que el Pendrive no va a entrar en tu computadora nunca" - Un comentario muy de doble intención, pero no me importaba, ¿Como se atrevía a tratarme así?.
"Uuh, que rudo" - Responde en tono de burla y cuelga antes de que me de chance de contestarle.
Al cabo de unos minutos se abre la puerta del ascensor y allí estaba, yo lo es paraba en el umbral de la escalera, deje que pasara de largo, abriera la puerta y reja, y luego entre a su casa, cerrando reja y puerta detrás, allí estaba el, poniendo música alta de nuevo y yo pase de largo y lo espere junto a la puerta de su cuarto con los brazos cruzados.
"Pero que obediente.." - Comienza a decir por sobre la música y yo lo hago callar poniendo una mano en su cuello y con la otra poniéndolo contra la pared.
"Cierra la maldita boca, puta" - Le digo, y ni yo me reconocí en ese momento, supongo que era una mezcla de excitacion y furia, el por un momento pareció confundido pero puso una mano sobre mi entrepierna y con otras apretó mis mejillas, a lo que respondí besándolo hambriento sin quitar las manos de su cuello, alejaba por momentos mi cara de la suya y el buscaba acercarse para besarme, pero deje de hacerlo y acercó sus labios mojados a mi oído.
"Eres un miedoso de mierda" - me dice y me lame la oreja " Y te prefiero sudado la verdad, ¿Te bañaste y te perfumaste solo para venir a verme? - Muerde mi lóbulo y yo quedo atonito, la verdad si daba el mensaje opuesto al desinterés con mis acciones, mi entrepierna ardía por la manera en la que Sebas la masajeaba y la cosas que me hacía.
Lo aparto de mi oreja y nos miramos fijamente, intenta besarme pero lo alejo, comienzo a quitarme los zapatos sin quitar ambas manos de su cuello y el sonreía, metiendo una mano por debajo de la camisa y la otra por dentro de mis shorts, frotando su mano en mi ereccion y la otra pellizcando mi pezon, me acerco lentamente como si lo fuera a besar y al último segundo me echo atrás, viendo su descontento ya que el incluso había cerrado los ojos esperando que lo besara, me acerco y lo beso mordiendo su labio inferior y se le escapa otro gemido qué se mezcla con la música de la sala.
De un momento a otro, sin darme cuenta estábamos dentro de su cuarto, el me empujó hacia atrás y caí soltando su cuello, el entró y cerró la ventana y cortina de su cuarto rápidamente, yo quedo sentado en el piso y el se acerca, sentándose sobre mis muslos,
Bailandome lento al ritmo de la música de la sala, yo ya estaba fuera de mi, ya estaba sudando, comencé a lamer sus labios y comence a meter y sacar mi lengua de su boca, el sabía a piña y yo a dentrifico, se lanza sobre mi y me acorrala contra el piso, soltando una gota de saliva que cae lentamente desde su boca aterrizando en la mía, ambas manos estaban en mi pecho y mis manos se posaron en sus nalgas colosales, masajeandolas y dándole nalgadas, el comenzó a frotar mis pezones sobre la camisa y con mis manos lo posicione para que frotara sus nalgas en mi notable ereccion.
Acerca de nuevo su cara a mi, y por primera vez nos besamos de manera suave y dulce rompiendo un poco el ritmo.
"Te tengo un regalo" - Me dice al oído con su aliento caliente y se baja de mi, quitándose los zapatos y los pantalones, revelando una ropa interior qué nunca había visto antes, luego investigue y me entere de que se llaman Jockstraps, me levante sobre mis codos y aprecie esa ropa interior tan sensual, sin pensarlo me subí a su cama y me quite la camisa.
"¿A cuantos no le habrás dicho eso?" - Le digo poniendo las manos detrás de la cabeza.
"Idiota" - Me responde acostándose sobre mi, boca abajo, subiendo lentamente ese par de jugosas nalgas y ese ano rojizo que me causaba tanta hambre, no pensé dos veces y me incline hacia adelante, acercandome a su ano, oliendolo lentamente, el me quito las medias y comenzó a lamer mis pies, a lo que respondí comenzando a mordisquear su enorme jamón, el besaba y lamia mis pies con hambre también, supongo que realmente nos deseabamos en ese tiempo.
Sin más preámbulos, comencé a lamer sus nalgas y pasar la lengua por su ano, el cual abría y cerraba constantemente, lo cual provocó que me perdiera entre sus nalgas comiendo ese ano que tanto deseaba y metiendo mi lengua dentro como tanto le gustaba, el dejaba de mover sus nalgas de adelante a atrás, como señalandome qué no parara. Que bien le quedaban esos jockstraps, puse un mano en una nalga y la otra en su bulto bien duro y el paro de lamer mis pies, supongo que gemia pero esta vez sentí que la música estaba más alta y no podía escuchar sus gemidos, metí dos dedos en mi boca y de allí los lleve a su ano, metiéndolos lentamente, dilantandolo, el respondió poniéndose en cuatro y arqueando bastante la espalda mientras se aferraba fuertemente a mis piernas y lamiendo mis pies de nuevo.
Comencé a meter y sacar profundamente mis dedos y ahora si lo escuchaba gimiendo, con la otra mano me masajeaba el pene sobre mis shorts, hasta que pare, tome los jockstraps por los bordes y se los quite, deslizando los por sus piernas y tirandolos lejos, pude apreciar su ereccion, la verdad es que traía un buen paquete, unos 15 cm aproximadamente, muy venoso, no era tan gruesa como la mía pero estaba realmente muy dura, el se sienta de repente en la cama.
Me señala los shorts y me ayuda a quitármelos junto con mis boxers, después se quita la camisa y sin más preámbulos se arroja rápido sobre mi verga y comienza jugar con ella, frotando hacia abajo mi glande, tomando el líquido preseminal y jugando con el entre sus dedos para meterlo en su boca, yo lo observaba atentamente, me di cuenta que como aquella vez, no estaba controlando bien mi respiración, así que me puse en ello.
Comenzó a pasar su lengua sobre mi glande en círculos y sonreía al ver como me retorcía y gemia por la sensación de su lengua, al darse cuenta que se había tragando toda mi precum, se paró y buscó en su gaveta un Condon, lo abrió, y sin dilaciones me lo puso lentamente, yo sentía que iba a acabar pronto, el jugo un rato con mi verga, ajusto bien el Condon y comenzó a darme un oral, el Condon era de sabores, era amarillo así que supongo que era de banana, lo tome del cabello y empecé a guiar el ritmo del oral, el ya casi la metía toda así que sin titubear lo halaba del cabello para que la sacara toda y s ela volviera a meter a fondo, ese sonido que hacia al ahogarse era el cielo, aun lo recuerdo y me excita muchísimo.
Paramos y se sienta en la cama como esperando la orden, le hago una seña para que acerque su oído.
"Te vas a sentar en ella y la vas a meter toda" - El me miró sorprendido y parece que le encantó, me beso y un sabor como a chicle de banana me inundó la boca, supongo que el Condon si era de ese sabor después de todo. Le hago la señal para que acerque sus nalgas, lamo su ano de nuevo e introduzco el pulgar para dilatarlo bien, el de pronto acabo, disparando su semen sobre la cama y mis pies, yo saco mi pulgar y el lame su semen de mis pies y lo traga.
Me acuesto más atrás y pongo la espalda en el copete de la cama, abriendo las piernas para hacerle un espacio al culto de Sebas, el se acerca y los ayudo a meter mi verga en su ano, primero mete el glande y lo saca rápidamente, lo que me hace entender que lo lo disfrutaba, se veía muy tenso, la volvió a meter pero solo hasta la cabeza y la volvió a sacar, yo lo tome del hombro e hice que se volteara, lo atraje para besarlo y me dejo, lo bese y lo acaricie por todos lados, sintiendo como dejaba la tensión atrás, meti mi índice y mi dedo medio en su boca, pongo una mano en su nuca para que no dejara de besarme y meto los dedos dedos húmedos en su ano, el gemia en mis labios y yo le comencé a acariciar el cabello mientras metía y sacaba mis dedos mientras con una de sus manos me masturbaba.
Solté su cabello y comenzó a besarme desde mi cuello, trazando camino hasta mi pene, el cual se metió todo de golpe y yo no pude evitar retorcerme de placer mientras el metía y sacaba todo mi miembro de su boca mientras me veia, le puse una mano en la barbilla para que alzar a la cara, lo hizo sacando mi miembro de su boca.
"¿Listo?" - Asintió y se posiciono de nuevo para meter mi verga en su delicioso culo, metió la cabeza y un poco más, pero estaba apretando mucho, así mismo me incline hacia su oído "Estas demasiado tenso, así no va a entrar".
Asintió y la saco, posicionando se bien y metiendo de nuevo la cabeza y un poco más, pero aunque estaba más relajado, se veía que no lo disfrutaba, se me vino a la mente que tal vez era la posición, así que la saque y me baje de la cama, posicionandolo en cuatro patas y besándolo desde los pies hasta su cuello lentamente, arqueo bien su espalda y comencé a lamerle el ano y mordisquear sus nalgas, allí estaban sus gemidos de nuevo, metí mi pulgar en su boca, luego en la mía, escupí su ano y procedí a meter allí mi pulgar sintiendo las ricas paredes de su orificio.
"Mejor?" - Pregunte acercandome a su oído y dándole besitos en el cuello, el solo asintió y puso ambas manos sobre sus nalgas para abrirlas bien, yo comencé a meter mi miembro, solo llevaba la cabeza y ya estaba tenso y apretaba mucho, por lo que pare y comienzo a acariciar sus nalgas pero el seguía tenso, saco mi pene e intento volver a meterlo pero seguía siendo la misma historia, por lo que decidí dejar de intentar penetrarlo, me quite el Condon, lo tire a un lado y comencé a frotar mi pene entre sus nalgas, lo que si parecía gustarle, al cabo d eun rato acabe sobre sus nalgas y espalda, recogí mi semen y lo compartí boca a boca hasta que no quedó más y me acosté boca arriba en su cama.
"Estuvo genial, gracias por todo" - Me dice y por primera vez lo veo sonrojado.
"Si, esa ropa interior estaba muy sexi" - Le dije sonriendo.
"Deberíamos bañarnos, estamos hechos un desastre" - Asiento.
"Dame un momento, por favor" - El se dirige al baño y yo me quedo unos minutos acostado, me paro me dirijo al baño y terminamos tocandonos lo que nos llevo a seguir con la acción, acabe de nuevo en su cara y el no paraba de besar mi verga, se trago cada gota de semen que bote, nos bañamos, nos vestimos y cuando iba a salir de su casa me llama.
"El Pendrive, recuerda que venias porque te iba a pasar música" - Dice haciendo comillas con sus dedos.